El sexo, actualmente, ha sido un tema que se toma a la ligera, se podría decir que se ha perdido el respeto por lo que implica una relación sexual. A pesar de esto, no me quedan dudas, como mujer, como médico o como persona, de que estamos en una sociedad que banalizó el sexo de tal forma, que ha permitido que proliferen los embarazos en adolescentes y/o no deseados, la enfermedades de transmisión sexual y muchas situaciones sociales graves que se han facilitado por la trivial definición que se le da al sexo hoy día. Sin embargo, la primera vez o la pérdida de la virginidad, es aún un tema, sobre todo en la población de adultos jóvenes que genera inquietudes, tal vez no de la misma manera y con el mismo tipo de tabú de hace unas décadas, pero, aun así, las dudas sobre esta experiencia, que incluyen embarazo no deseado, infecciones de transmisión sexual, preparación emocional y física entre otros, merecen la pena ser abordado y discutido siempre. Es el deber de la comunidad médica mantener en discusión estos tópicos tan importantes en el desarrollo de la vida diaria de la población, ser constantes en la promoción de salud, y asumo esa responsabilidad con alegría y honor.

 

¿Estoy preparada emocionalmente para tener relaciones sexuales? 

Esto lo indica más nuestra actitud frente a la vida diaria que cualquier cosa. Personalmente opino que se está lista para iniciar una vida sexual cuando somos capaces de tomar esta decisión, informada y asumiendo la responsabilidad de lo que la vida sexual activa es y todo lo que implica.

Lamentablemente, estoy consciente de que este escenario es el más escaso y es muy lamentable, porque esa es la mayor de las razones por las cuales obtenemos consecuencias que no queríamos y lo último que desearíamos es arrepentirnos de nuestra primera vez. Por eso todos los días debemos empoderarnos de información y siempre ejercer nuestro derecho a estar informadas sobre cómo protegernos y cuidar de nuestra salud.

¿Qué es el sexo consensuado o consentimiento sexual?

Actualmente se define el consentimiento sexual como un acuerdo para participar en una actividad sexual. Antes de mantener relaciones sexuales con otra persona, debes saber si esta persona está de acuerdo. Es importante ser honesto con tu pareja sobre lo que deseas hacer y lo que no.

Consentir y pedir consentimiento consiste en establecer tus límites personales y respetar los de tu pareja; debes volver a preguntar si las cosas no están claras. Para que sea algo consensuado, ambas personas deben estar de acuerdo en tener relaciones sexuales, todas y cada una de las veces.

Esta pregunta parece tonta, pero de hecho no lo es. Cada persona por su crianza y su manera de ver la vida tiene diferentes límites a lo que permite que se desarrolle en una relación interpersonal, pero debo dejar claro esto: Si tú no quieres, no es consensuado. Si te hace sentir intimidada e incómoda, entonces no quieres, no es consensuado. Si estabas al comienzo o durante tú dices no, es NO. En ese momento deja de ser consensuado. 

La verdad es que este punto es crucial, que reivindica los derechos de la mujer en continua revolución el día de hoy y esto es el poder decir: NO. 

Si tú no quieres, entonces NO. Así de sencillo. Si tu novio insiste, pero tú no quieres, entonces NO. Si sientes presión porque tu grupo de amistades ya sostienen relaciones sexuales y tu aun no, entonces aun NO estas preparada.

Y tener y entender la responsabilidad que tienes sobre ti misma, te hace más madura, aterrizada e inteligente. 

¿Hay una edad específica en la que deba tener sexo?

Esta es una pregunta común, actualmente las cifras de inclusión de jóvenes a una vida sexual activa han ido en ascenso, disminuyendo cada vez más su población en edad. Esto quiere decir que más jóvenes se incluyen cada día más en el sexo y por eso es muy importante que estemos siempre empoderadas con información para cuando esta oportunidad o momento se presente. Una edad en la que nuestro organismo está preparado para una vida sexual activa es a los 17-19 años, pero esta tendencia ha ido en disminución alcanzando los 13-15 años de edad.

También tenemos que tomar en cuenta un hecho y es que el comienzo de una vida sexual demasiado temprana aumenta significativamente las probabilidades de contraer cáncer de cuello uterino.

Es crucial tomar en cuenta el hecho de que cada persona en el desarrollo psicológico propio tiene el derecho de decidir cuándo quiere comenzar a sostener una vida sexual, del tipo y orientación sexual que sea, pero que venga de su decisión, mientras esta sea informada sobre el pro y contras que intervienen en una vida sexual activa. Pues es la toma de responsabilidad propia y la conciencia sobre todas las consecuencias que esto implica la que nos indica que estamos emocionalmente maduras para iniciar esta etapa de la vida.

¿Qué pasa en mi cuerpo al perder la virginidad? / ¿Qué es lo normal en mi primera relación sexual? 

Nuestro organismo reacciona de manera natural al acto reproductivo, hablando científicamente, instintivamente estamos configurados para una relación sexual. 

Cuando el acto sexual inicia, sentimos taquicardia, nuestro corazón se acelera, la respiración se hace entrecortada, esto por la adrenalina y emociones  que implica el acto sexual.

Tal vez hayas escuchado el nombre “endorfinas” las cuales son sustancias químicas que produce nuestro cuerpo y que intervienen en los procesos de sentir placenteros, en este momento, nuestro cerebro se inunda de endorfinas dando paso a el sentir de profundo placer que implica el acto sexual.

Nuestro cuerpo empieza a ruborizarse en algunas partes, las mejillas, el abdomen y el pecho. Además, de que los mayores cambios se dan en los genitales, se produce la lubricación vaginal que facilita la penetración, el área vulvar se enrojece y dilata y se puede notar que el clítoris aumenta su tamaño, de hecho, se describe en la literatura que puede asumir hasta el doble del tamaño usual.

 

Al momento de la penetración esta puede ser un poco dolorosa la primera vez e inclusive se puede evidenciar un poco de sangrado, esto se debe a la ruptura del himen, una pequeña capa fibrosa que está en nuestra vagina normalmente cubriéndola solo parcialmente, la cual es normal su ruptura al momento del acto sexual por primera vez. 

Alcanzar un orgasmo, que no es más que ese punto máximo de placer y satisfacción, es una posibilidad, pero no algo seguro. Hay muchos factores que intervienen para alcanzar el orgasmo, no solo a nivel físico ya que depende mucho de cómo seas estimulada por tu compañero sino también el estado emocional que incluye esta experiencia. Es normal estar nerviosa, con un poco de temor por la novedad del acto y a veces esto interfiere con la completa culminación del acto sexual con el orgasmo en nosotras las mujeres. 

Emocionalmente, es normal este pequeño temor hacia algo desconocido, pero solo eso. Bajo ningún concepto o condición tienes que mantener una relación sexual donde estás inundada de miedo, con un compañero que te presiona a hacerlo o bajo condiciones que no te son cómodas. Créeme que no sentirás ningún placer ni satisfacción antes, durante o después del acto sexual si hay algo forzado en el desarrollo de la relación.

Cuando logramos alcanzar este punto de excitación máxima, nuestro cuerpo responde a este automáticamente, nuestro cerebro se inunda de endorfinas y otros neuroquímicos que facilitan la sensación de placer, puede haber gemidos, sudoración, movimientos musculares involuntarios hasta alcanzar el punto de mayor intensidad de placer y bienestar. Según las últimas investigaciones un orgasmo en la mujer puede llegar a durar hasta 1 min 25 segundos.

Posterior a ello, nuestro cuerpo la mayoría de las veces entra en un estado de relajación y descanso, que en muchas ocasiones deriva en sueño.

Me da miedo quedar embarazada

Es muy comprensible que este miedo exista, y es completamente aceptable y prudente que nos preparemos siempre para esta posibilidad. Dependerá de nuestro sentido de la responsabilidad protegernos de las maneras más efectivas para evitar embarazo no deseado.

La mejor manera y la más fácil es la utilización del condón o preservativo, actualmente el más sencillo de obtener y utilizar, sin mencionar la alta eficacia de este método. Existen otros métodos un poco menos difundidos porque su uso es menos frecuente.  Entre las diversas opciones que tienes de métodos anticonceptivos se encuentran los implantes subdérmicos y el DIU hormonal, ellos son una excelente opción como método anticonceptivo a largo plazo reversible, evitan el gasto constante en pastillas anticonceptivas o condón (si tienes una pareja estable) y luego de su colocación te puedes olvidar de que lo tienes allí, hasta que se acerque la fecha de su cambio. Recordemos el diafragma vaginal, la T intrauterina, los espermicidas entre otros, que, a pesar de poseer eficacia, no son tan seguros como un preservativo, en cuanto a estos métodos lo más sensato y recomendable es que sea indicado por tu ginecólogo.

Para que se dé la concepción es absolutamente necesaria la penetración vaginal por parte del pene, y  que este lo haga de tal forma que logre depositar semen en ella facilitando así el transporte de los espermatozoides al óvulo femenino logrando fertilizarlo. Esto quiere decir, que no hay otra forma de que quedes embarazada, ni por sexo oral, o penetración y juego genital con los dedos, o simplemente compartir un baño, una cama o una piscina. 

¿Y las infecciones de transmisión sexual?

Es un tema muy importante para tomar en cuenta. Siempre existe la posibilidad de que haya una enfermedad de transmisión sexual si tu pareja es sexualmente activa y tú no. Sin siquiera saberlo tu compañero podría contagiarte de una infección de transmisión sexual.

Recuerda siempre la existencia del VPH y su proclividad al cáncer de cuello uterino. Del VIH que todos los días sigue cobrando vidas en el mundo y no dejemos de lado la sífilis, la gonorrea, clamidia, herpes virus entre otros.

Es absolutamente nuestra responsabilidad protegernos en este acto sexual consensuado, no solo del embarazo no deseado sino también de las infecciones de transmisión sexual, afortunadamente existe ese método casi casi perfecto que es el condón o preservativo, el mejor método de barrera para poder impedir y disminuir casi a su totalidad las posibilidades de contraer una enfermedad de transmisión sexual.

Este es un tema mucho más importante y complicado de lo que la mayoría cree, pero es muy importante siempre tenerlo en cuenta y con esto, a menos en forma de resumen las preguntas y dudas más relevantes con respecto a este tema.

Recordemos que somos nosotras mismas las que tenemos la responsabilidad de cuidar de nuestro cuerpo y protegernos. La salud es nuestro derecho, pero también es nuestra responsabilidad. Algo positivo que hemos logrado como sociedad es hablar más del tema, la remoción de la prohibición de estos temas del interés público, que no tenía sentido porque es algo que es parte de la vida humana y siempre debe ser discutido.

Mi última intención es asustarlos con este artículo, puede parecer un campo minado una vida sexual activa, pero tampoco podemos olvidar la parte buena. Es un acto de descubrimiento personal, en el que te conoces a ti misma de una manera que nunca lo habías hecho. Y si es con esa persona que quieres, que deseas, con esa persona que te genera confianza puede ser una experiencia hermosa que no olvidarás ni lamentarás. Está en nuestras manos hacer de esta una experiencia agradable e inolvidable.

Actualmente todos los movimientos feministas honestos que buscan la igualdad afortunadamente han conseguido tener voz y voto, difusión, los medios de comunicación y las redes sociales han logrado abrirnos las puertas a la información que necesitamos para poder ejercer una vida sexual activa sana y protegida siempre.

Esta generación de mujeres ha sido una generadora de muchos cambios importantes en el mundo, que nos han reivindicado no sólo en la sociedad, incluyendo el ambiente laboral y profesional en el que orgullosamente tenemos más oportunidades de alcanzar nuestras metas y aspiraciones.

Así que recuerda empoderarte, con información. Toma las riendas y sé responsable de ti misma, cuídate siempre y date siempre el lugar que mereces, hazte tus chequeos frecuentes, con tu ginecólogo.  Planifica de la manera más sensata y acorde a lo que te haga sentir cómoda.

Si deseas una asesoría médica, estoy para ayudarte, escríbeme a mi WhatsApp +58 412 701 50 86